Miedos nocturnos

imagesHablemos de los miedos nocturnos. El hecho de acostarse representa un problema para algunos niños, ya que la soledad y la oscuridad contribuyen a que sus sentimientos tengan vía libre, por lo que afloran libremente “situaciones de impacto”, que se traducen en cierto desasosiego que les obliga a pedirnos un vaso de agua, leer un cuento, dejar la luz encendida, etc. Es decir, que un niño que durante el día es seguro y maduro, pierde el control y la autosuficiencia: son los miedos nocturnos..

Si ocurre en la primera fase del sueño y el despertar es brusco, excitado y desorientado (a veces ni reconocen a los padres) o al día siguiente no recuerdan nada, es una situación que tenemos que vigilar y que de repetirse, exigen el asesoramiento de un especialista, ya que se encuentran muy relacionados con trastornos de ansiedad.

Como prevención habría que reducir o evitar el consumo de bebidas con cafeína y otros excitantes, especialmente antes de dormir; separación de una hora entre la última comida y la hora de acostarse; controlar el tipo de videojuegos, programas de televisión, etc., para que no sean fuente de angustias, vigilar  la relación entre los padres y su comportamiento ante los hijos, evitando discusiones.

Se les puede ayudar con una infusión de toronjil antes de acostarse, una cucharadita en una taza de agua caliente, colar y tomar.

Me gustaría hacer un comentario chistosillo, pero este tema me parece tan delicado (y lo he vivido tan de cerca!), que sólo recomiendo paciencia y tiempo  a los sufridos padres. Ánimo!