Hacer cookies para el té

Os voy a pasar la receta de unas “cookies”, esas típicas galletitas inglesas que se sirven, principalmente con el té. Deliciosas y que podéis guardar varios días en una cajita metálica………si os sobran, claro!!!

“COOKIES”

Ingredientes: (para 20 galletas)             cookies-galletas

2 yemas de huevos duros

150 g de harina

120 g de mantequilla

60 g de azúcar avainillado

una pizca de sal

150 g de granillo de chocolate

Mezclar todos los ingredientes con las yemas de huevo desmenuzadas hasta obtener una pasta fina. Formar una bola y dejarla reposar 1 hora en lugar fresco.

Extender la pasta con un rodillo, hasta obtener un grosor de ½ cm. Con un molde apropiado cortar los discos.

Colocarlos en una bandeja untada con mantequilla y cocerlos 10 minutos, a horno a temperatura media.

Cuando las galletas estén hechas, retirarlas de la bandeja y dejarlas enfriar.

Ya se que en el mercado se encuentran paquetes por menos de un €, pero no nos engañemos, ricas están, son baratas, a los niños les encantan y a nosotros nos permiten tener más tiempo libre; pero la mayoría de estos productos son una fuente de grasas saturadas, aceites hidrogenados y aditivos diversos que en nada benefician nuestra salud.

Es frecuente encontrarnos con niños que sufren ya los problemas de colesterol elevados a edades tempranas. Exigimos que en los comedores escolares la alimentación de nuestros hijos sea sana y equilibrada y cuando llega el fin de semana, en ocasiones, recurrimos a platos preparados para “ganar tiempo” y es que el mercado nos ofrece de todo: gazpacho, caldo de pescado, caldo de carne, tortilla de patatas (con y sin cebolla) y una lista interminable de preparados para hacer tartas y bizcochos “caseros”.

Yo, desde luego, los recuerdos que tengo de mi infancia son: las albóndigas que hacía mi abuela, las croquetas de mi madre, las magdalenas y mantecados de mi tía y ese inconfundible olor a membrillos y manzanas por todos los armarios de la casa.

Gracias Mili, ahora sólo falta acostumbrarse al té! Chica, si es que yo soy del café con leche de toda la vida. Y eso que ahora está tan de moda el té verde, rojo, amarillo, fucsia y morado. Qué no! que donde esté un buen cafecito caliente que se quiten todas las aguas calentujas del mundo. A qué sí?